The Town: De algo se tiene que vivir
domingo, octubre 24, 2010 | Etiquetas: 2010, cartelera, cine de acción, crítica, opciones de cine, opinión |
Sabes que te caía mal Ben Affleck. Sabes que sí. Y no los culpo. Luego de tener varios triunfos, en especial al lado de su pana Matt Damon (en especial el Oscar por el guión de Good Will Hunting), de repente algo hizo que como actor se le volaron los tapones. Daredevil (meh). Paycheck (WTF?). Gigli (oh pol Diox…). Y de repente, decidió pararse detrás de cámaras en 2007 y dirigió a su hermano Casey en Gone Baby Gone, una adaptación de una novela de Dennis Lehane (quien también escribió Shutter Island y Mystic River). El thriller criminal se ganó 94% en el Tomatómetro de Rotten Tomatoes, una nominación a Mejor Actriz de Reparto para Amy Ryan, y recuperó su inversión tanto en taquilla como en DVD. De modo que mientras los talentos actorales de Ben Affleck puedan ser cuestionados –yo digo que el pana es decente y hasta sólido—su manejo de las cámaras no lo es. No he podido ver Gone Baby Gone para compararla con su segundo intento como director, The Town, pero si en efecto es mejor que esta, como he oído, de pana la buscaré con ahínco, pues The Town es, sin duda, muy, muy buena. Bien por ti, Ben.
Affleck cumple doble función delante y detrás de cámaras como Doug McCray, un ladrón de bancos de profesión cuyo último trabajo tuvo un giro inesperado: uno de sus compañeros, el irascible Jem (el genial Jeremy Renner de The Hurt Locker), decidió tomar a Claire, la gerente del banco (Rebecca Hall, de Vicky Cristina Barcelona y, oh sí, The Prestige) rehén –y le quita su licencia de conducir. Doug decide investigar a ver qué sabe Claire, y oh sorpresa, empiezan a enamorarse. Sabiendo que su padre (Chris Cooper) está cumpliendo cárcel por no delatar a sus compañeros, viendo la promesa de una vida tranquila con Claire, y con un decidido agente del FBI (Jon Hamm, de la serie Mad Men) en sus tobillos, Doug empieza a preguntarse si la vida de ladrón vale la pena –y si en efecto podrá escapar de ella.
Una de las formas en que yo mido la calidad de una dirección es la clase de actuaciones que el director logra sacar a sus actores, aún los más mediocres. Y lo más consistente de The Town son actuaciones que van de muy buenas hasta extraordinarias. Con todo el dolor de mi querida amiga Carmen, Jon Hamm es el elemento más flojo del elenco. No porque sea malo, sino porque no me creo que el tipo sea un machote superagente del FBI. ¿Demasiado metido en su papel de Don Draper? Puede ser. Pero no me trajo la verdad al papel; se me hizo que simplemente quería cobrar su cheque. Tan me lo creo que mucho más me convenció Blake Lively, quien hace de hermana de Jem y ex novia de Doug. Luego de varios papeles de adolescente, en particular en la serie Gossip Girl, al fin parece que la niña está empezando a crecer. Más allá de hacer de una pobre “white trash” de segunda mano, Lively logra darle a su personaje un alma. O sea me convenció más que Jon Hamm. Eso que diga algo. Sorry.
Hall me sigue impresionando con cada papel que la veo. Para mí, ella fue lo mejor de Vicky Cristina Barcelona después de Penélope Cruz, lo que es decir algo. Ella tiene una carita sumamente dulce, pero es tan natural en sus actuaciones que es imposible que no te agrade. Y no tiene esa belleza sobrenatural que pueda intimidar; es la propia chica de al lado. Y tú te crees que pasó por algo traumático, y está haciendo un esfuerzo por superarlo. La química entre ella y Affleck es bien simpática, pues aunque los dos están sus 30, podrían estarse cortejando recién salidos de la universidad.
Y aquí entra otro elemento interesante de esta película. Se nota que Affleck es un nativo de Boston, pues la relación entre su personaje y el de Hall refleja además la constante tensión (no puede llamarse lucha) entre las clases obrera y media en esa ciudad. Así, Boston en efecto se convierte en escenario y protagonista, con todas sus idiosincracias y escenarios, con su extraño acento y su tendencia a los robos de banco.
Affleck, ahora como actor, lleva ese amor por Boston a su interpretación de Doug. Mientras le nota un amor al sitio, no le cuesta nada decirle a alguien: “Pronto tendré esta ciudad en mi retrovisor”. Por eso los robos de banco, para poder tener una vida que ofrecerle a alguien. Además va un poquito en contra de su imagen de galanzote carismático, pues aunque es rápido de sonreír no vive haciendo chistes a diestra y siniestra. Algo de un secreto de infancia, debe ser. Que su padre no le dice, por cierto. (Chris Cooper aparece exactamente cinco minutos en esta película. Y son de los mejores cinco minutos de ella.)
Pero es Jeremy Renner quien realmente se luce. Este sí es un chico malo, pero es un chico malo con corazón. No le importa meterle una bala a alguien, pero a la vez se preocupa porque sus amigos estén bien. Pasa que a veces s temperamento lo lleva por el camino equivocado. Renner no es el cliché de villano que uno pueda esperarse, pero no es exactamente un antihéroe tampoco. Esa es una línea sutil de diferencia, y al Renner poder caminarla sin problemas, demuestra que la nominación por The Hurt Locker no fue un accidente. Este va a ser un genial Hawkeye y más allá.
Lo único en que podría cojear The Town es que se nota que quiere montar una discusión filosófica sobre la cultura del crimen, y no ahonda lo suficiente en ello. Mientras que las dos escenas de robo de banco son lo bastante tensas, las conversaciones entre criminales y todas sus motivaciones me parecían un poco inútiles. Mientras nunca estaba realmente aburrido, sí me encontré varias veces queriendo que las cosas avanzaran un poquito más rápido.
Más allá de eso, empero, Affleck demuestra que su carrera como director está arrancando de una manera bien promisoria. The Town (sí, me rehúso a llamarla Relaciones Peligrosas) es un thriller policíaco bien armado, excelentemente escrito y actuado. Si el hombre nunca vuelve a actuar será chimbo, pero lo lamentaré. Si no vuelve a dirigir creo que realmente me entristeceré.