El Cine Tuyo, Mío y Vuestro

Siento que cada vez que muere un actor cómico, el mundo se vuelve un poco menos tolerable. Cuando es un veterano como Leslie Nielsen, quien falleció hace unas horas en un hospital de la Florida por complicaciones causadas por neumonía, hay sentimientos encontrados, pues el hombre no había tenido un papel destacado en muchos años.

Lo que sí hay que admirar del actor de 84 años originario de Regina, Canadá (nació el 11 de febrero de 1926) es que nunca dejó de trabajar. Creo que sólo se detuvo cuando lo hospitalizaron hace 12 días por el mal que finalmente se lo llevó, pero ver su página de IMDB es casi infinita: 239 participaciones desde su primera participación en un teatro televisado en 1950, hasta la animada The Waterman Movie, pautada para estrenarse en enero del año próximo. No hubo un año que el hombre no trabajara, y eso es una carrera de casi 60 años.

Empezó haciendo de galán, cosa curiosa, pero ciertamente tenía el tamaño y el aspecto clásico de la época dorada de Hollywood, apareciendo en películas como Forbidden Planet (1956) y La Aventura del Poseidón (1972). Incluso en años siguientes aún apareció en algunos dramas, como en Me Quieren Volver Loca (1987). Pero de repente, Jim Abrams y Jerry y David Zucker vieron algo cómico en él y le dieron un papel en Airplane! (¿Y Dónde Está El Piloto, 1980), y de ahí Nielsen descubrió la vena cómica que le latía debajo de la piel.

Pocos años después del éxito de la comedia de los Zucker, el ahora canoso actor aceptó una parodia televisiva de las series de detective de los 50 llamada Police Squad!, que aunque sólo duró seis episodios fue luego desarrollada a un trío de exitosas películas llamadas The Naked Gun (¿Y Dónde Está El Policía?), en el que seguramente será su papel más famoso, como el torpe teniente Frank Drebin. Hay tantas escenas absurdas en esta serie de películas, incluyendo una memorable burla del incidente del vómito del presidente George Bush (padre) sobre el embajador japonés en The NAked Gun 33 1/3, que escoger una sola es una maldad (pero no se crean, la primera es mil veces la mejor).

Y después de eso, no sé qué pasó. La última película que pueda valer la pena mencionar es la genial Dracula: Dead and Loving It, la última parodia de la mano de Mel Brooks, y esa fue en 1995. Después de eso… wow. Spy Hard, un fracaso. Mr. Magoo, un intento de traer la clásica comiquita a la vida, un fracaso. Wrongfully Accused, una burla de El Fugitivo, un fracaso. Santa Who?, Scary Movie 3, Scary Movie 4, Superheo Movie, Stan Helsing, Spanish Movie… ¡DIOS! Está bien que trabaje siempre, pero no siempre era la mejor de las calidades, para ser sincero. (Y conste, estoy siendo respetoso con el difunto.)

Pero igual lamento la partida de Nielsen, pues ciertamente daba la imagen de ese tío divertido que a lo mejor te daba pena escuchar sus cuentos de cuando se escapaba en las noches, pero siempre estaba dispuesto a hacerte reír sinceramente. Cierto, su trabajo al final no era muy bueno, pero es admirable estar 60 años en Hollywood y no ganarse una sola controversia, una sola aparición en los tabloides. Que en paz descanse, y que la risa que nos causó nunca se apague.