Cameos van y vienen para la secuela de The Hangover

lunes, noviembre 15, 2010 |

A veces me saca la piedra estar pendiente de las informaciones del mundo del cine. Eso me ha arruinado más de una sorpresa, como fue la aparición totalmente inesperada de cierta leyenda de la comedia en Zombieland (no esperen a que les diga quién). Y ahora, con las noticias que vienen y van de la venidera secuela de The Hangover, que se está filmando actualmente en Bangkok, Tailandia, me estoy temiendo que muchas sorpresas –algo de lo que la primera dependió mucho para conseguir su magia— se me van a arruinar antes de tiempo.

Así que voy a tratar muchas de estas noticias como potenciales spoilers para no arruinarles la sorpresa final. Si quieren leerlo, resalten el texto.

SPOILER: Esta semana la revista People confirmó que una de las estrellas invitadas será nada más que el ex presidente Bill Clinton, quien —obvio— se interpretará a sí mismo. Aprovechando que el Willie estuvo en Bangkok para un discurso en pro del medio ambiente, el equipo de la película rodó sus escenas con un fuerte dispositivo de seguridad. Si la secuela tiene la misma osadía de la primera, me espero referencias a cigarros y vestidos azules.

O quizá no. FIN SPOILER

Ese va a ser interesante, por decir lo menos, pero el cameo que yo más quisiera ver es el que no se va a dar, ahora que a Mel Gibson le dijeron nanay nanay.

Por si no lo saben, Gibson iba a interpretar a un tatuador en la secuela, pero he aquí lo que dijo el director Todd Phillips: “Creo que Mel habría sido buenísimo en la película y tenía el apoyo completo [del presidente de Warner Brothers] Jeff Robinov y su equipo. Pero entiende que hacer una película es un esfuerzo colaborativo, y esta decisión al final no tenía el apoyo completo de todo mi elenco y equipo”.

Traducción: había gente que no estaba de acuerdo que Gibson, quien dijo algunos comentarios, em, subidos de tono racista y antisemita en 2006 cuando fue arrestado borracho, quien le ha dicho cosas, ah, medio agresivas a su ex novia por teléfono, estuviera en el set. No entiendo por qué.

Semi-spoiler: Gibson fue sustituido por Liam Neeson, a quien agradezco ver en una comedia de este estilo, en especial luego de su paso por Saturday Night Live (coño, busquen ese episodio, por su madre…), aunque no se sabe aún si va a ser el mismo papel, considerando que hace poco Neeson negó que interpretar a un artista de tatuaje. Quién sabe. También acaban de confirmar que uno de mis actores subestimados favoritos se une al elenco, como es Paul Giamatti. Más allá de su trabajo en Sideways y afines, lo que hizo en Man in the Moon o incluso The Negotiator (con Samuel L. Jackson y Kevin Spacey) fueron memorablemente divertidos.

Sin embargo, con todos estos cameos, yo aún estoy un poquito nervioso. A mí me fascinó The Hangover, como al resto del mundo: casi 500 millones de dólares de un presupuesto de cerca de 40 millones, con una historia inteligente y actuaciones memorables de Ed Helms, Bradley Cooper y Zach Galifianakis. (La foto muestra a los tres, junto con Justin Bartha, filmando la pelìcula en los primeros días de rodaje.) Pero al volverla a ver, sigue pareciendo divertida, pero mucho de su éxito se basa en el factor sorpresa que dispensaron. ¿Será posible, como leí por ahí, que logren que el rayo caiga dos veces en el mismo sitio? Pues bien, el estreno está pautado para el 26 de mayo de 2011 --¡lo sabremos entonces!

Mientras tanto, en Internet...

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